Incontinencia Verbal
¿En verdad estamos solos?
tu mirada disipa el dolor que amo a esta edad
no distingo color alguno más que el rojo en la realidad
se extingue la esperanza en cada lugar
que se llena de soldados defendiendo la desigualdad.
Hoy ya no temo a la ruleta rusa
arroja los dados y apuesta la vida
en la calle vuela la ceniza
el mareo con causa en el pegamento es una excusa
redundante en la mente del niño que lo utiliza
para dejar atrás el hambre u olvidar a su padre muerto
al cruzar la frontera de alambre.
No puedo creerme dios
que mi ánimo dependa de tu voz
como un perro tras de una prenda de algodón
un mínimo detalle da vuelta a mi corazón.
En la calle pasan sin mirar
mi cadáver en la esquina del bar
la gente quiere ver su vida convertida
en una fina comedia al medio día
pero el medio infestado de sida no se cura con saliva
y la salida del estado es imponer una novela en nuestras vidas
para tragarnos las mentiras de nuestros jodidos dirigentes
y que las mentes no despierten.
Un acorde de soledad acompaña
mi eterno viaje al borde del pensar
sin campaña ni carruaje
me veras caminar ligando historias sin freno
no conozco el aburrimiento.
La luna ilumina la realidad podrida
que tratan de disfrazar con un animal sobrenatural
pero las minas mutilan al pasar
una mujer que nadie se digna a mirar.
La calle sufre de incontinencia verbal
no inhalaremos la fragancia letal ni callaremos más
las expresiones de la consciencia nos darán libertad.
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