Indiferencia

Bajo cielos nublados con el corazón anclado a tu existir
Siento la sangre luir y con el sonido
de los árboles olvido el hambre y los pueblos de flores
que no pueden huir
de los destellos rojos que el olivo militar
sustituye en su cantar.

Es tu sonrisa la brisa que inspira la vida
y devuelve mi alegría resbaladiza
como en una sinfonía de rimas
las palabras se funden en mi melodía
bajo el sol de medio día.

Ahora que empiezas a desentrañar tu creatividad
como piezas de un rompecabezas
la interacción con otros ángeles sin alas
te enseña mas que la telebasura en casa
tus padres no comprenden lo que pasa por tu mente
porque perdimos ese toque
cuando la consciencia nos regaló otro enfoque

Juntos, así como arbustos bajo el sol del desierto
ustedes y nosotros escapamos del dolor
            olvidamos los muertos, amamos los huertos
llenos de color y frutos que nada saben de rezos
nada saben de huesos, no conocen los versos...

Un espíritu ancestral me acompaña
un silencia glacial como el aliento de la montaña
penetra en mis entrañas, escucho atento la voz
que en ese momento un roble arrojó al viento
en una epifanía color cobre
la vida se extiende en agua tierra y aire
unida en un momento.

Es perfecto el afecto que vuela en el viento
cruza toda la esfera como una oda saliendo de la cantera
ajeno a vuestro amor por la cartera repleta y vacío el corazón
Que siembra hambre y muerte en la pradera
mientras gozas con tu smart phone,

Os veo y no comprendo cómo cruzaron el trayecto
se dicen ser ingenieros mas invierten su tiempo en convertir
todo en dinero y migas  para el obrero
Pasas los días creyendo la verdad absoluta del noticiero
escuchando en el televisor
que la revuelta y el socialismo son el peor mal para la sociedad
que la felicidad viene empacada
desde el extranjero
y que la guerra traerá paz y estabilidad
al mundo entero.

Solo te preocupas por los tuyos
crees que son diferentes al resto
y no te importa el murmullo de los indigentes
y el hambre aferrada al rostro de una niña
que cruza la calle descalza mirando el cielo.

Es imposible aceptar
la indiferencia a la situación tangible
donde el sufrimiento sigue
a pesar del panorama nada claro
la esperanza ahoga cada escama
de mi cuerpo de pescado
cada que escucho un saxo
en el parque de a lado
y veo el pan compartido
por mi hermano esclavizado.

A.R.E. Marco